
Se quejaba de que mientras él hablaba en Indautxu, sus hermanos jesuítas no le invitaran a su casa de Deusto, a la Universidad, a apenas dos kilómetros de allí.
Hoy ha sido Jon investido doctor honoris causa por la Universidad de Deusto. Hace apenas un mes los padres jesuítas asesinados en 1989 recibieron de manos de Mauricio Funes, presidente del El Salvador, la máxima condecoración del Estado.
A veces, algunas veces (el cantor tiene razón), las cosas acaban en su sitio.
2 comentarios:
Y lo que aún queda por hacer.
Por suerte, continúan existiendo, estos "molestos cantores"
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